El Jefe de Gabinete Marcos Peña se presentó ayer en el Congreso de la Nación para presentar su informe anual de gobierno. En un discurso marcado por la polémica defensa al ministro Luis Caputo y los paraísos fiscales y el cuestionado argumento de la baja de la inflación, fue duramente criticado por la oposición por el constante endeudamiento externo y los negocios de sus funcionarios.
Como cada año, el Jefe de Gabinete Marcos Peña presentó frente al Congreso de la Nación su informe de gobierno, donde analizan el rumbo del país y las decisiones tomadas en el último año. En un escenario muy diferente al de su última presentación, que fue a pocos días del triunfo del oficialismo en las elecciones legislativas de 2017, Marcos Peña se encontró frente a una oposición que ve la realidad de una forma muy diferente a los miembros del gabinete de Mauricio Macri.
En un escenario muy diferente al de su última presentación, que fue a pocos días del triunfo del oficialismo en las elecciones legislativas de 2017, Marcos Peña se encontró frente a una oposición que ve la realidad de una forma muy diferente a los miembros del gabinete de Mauricio Macri.
Las acusaciones de corrupción hacia el gobierno ocuparon un lugar central en las disertaciones de los diputados, especialmente del ex-ministro de Economía Axel Kicillof, quien cuestionó el rol del ministro de Finanzas, Luis Caputo: “Si alguien abre una cuenta en un paraíso fiscal es porque esconde algo y no quiere pagar impuestos. ¡Es una guarida, una cueva, es sucio, turbio! ¡No pueden gobernar así!”. Los negocios financieros del ministro Caputo, cercano al entorno de amistades de Mauricio Macri, están sospechados por haber sido potencialmente beneficiados por las decisiones tomadas por su mismo gobierno.
La respuesta de Marcos Peña a las acusaciones de corrupción fue un claro y directo apoyo al ministro Caputo, donde explicó que a su entender las empresas offshore no implican delitos de corrupción, y agregó con acidez que “corrupción son los bolsos de López”.
Además de los cuestionamientos por corrupción, fue puesta en duda la visión positiva con la que el gobierno analiza el rumbo económico del país. Retomando aquella frase de campaña de Mauricio Macri donde afirmaba que “la inflación no será un problema en mi gobierno”, fueron analizados los números presentados por Marcos Peña en un contexto donde los aumentos de tarifas y la inflación continúan siendo un problema para los trabajadores de todo el país. Frente a la visión positiva con la que fue planteada la situación económica,la oposición los criticó por “gobernar desde un country” y no tener sensibilidad social para ver el impacto de sus decisiones en el pueblo.