El Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Jorge Macri, inauguró la primera “Casa Familia”, un proyecto pionero destinado a familias en situación de calle que buscan un espacio donde puedan reintegrarse a la sociedad de manera gradual y con el apoyo necesario para comenzar un nuevo proyecto de vida. La inauguración tuvo lugar en el barrio de Villa Luro, y es parte de una serie de iniciativas que buscan transformar la forma en que la ciudad enfrenta el problema de la vulnerabilidad social.

“Con este programa innovador, la Ciudad de Buenos Aires ayuda a quienes están atravesando momentos difíciles, ofreciéndoles la posibilidad de superar sus obstáculos en un entorno donde puedan tener mayor autonomía”, explicó Jorge Macri durante la apertura de la “Casa Familia Juana Manso”. Este programa marca un cambio de paradigma, ya que busca que las familias no solo tengan un techo, sino que también desarrollen las habilidades necesarias para reconstruir su vida.

El espacio, que se diferencia de los tradicionales Centros de Inclusión Social (CIS), tiene como objetivo promover la independencia de las familias. En “Casa Familia”, los residentes se organizan para gestionar las tareas cotidianas, como la limpieza, la cocina y la distribución de los espacios comunes. Además, gozan de mayor libertad en cuanto a los horarios de ingreso y egreso, lo que les permite recuperar progresivamente su autonomía.

“La calle no es un lugar para vivir, y mucho menos para los niños. Queremos que ninguna persona duerma en la calle y que cada familia tenga la oportunidad de reconstruir su vida con libertad y dignidad”, expresó el Jefe de Gobierno, destacando la importancia de garantizar que las personas que pasan por situaciones de vulnerabilidad puedan tener un futuro más esperanzador.

Cómo funciona “Casa Familia”

Cada “Casa Familia” ofrece a las familias un espacio privado, pero también cuenta con áreas comunes donde se llevan a cabo actividades formativas y laborales. Los residentes pueden participar en cursos de carpintería, peluquería, manicura, y talleres sobre prevención de enfermedades sexuales, embarazos no planificados y educación en crianza. También tienen acceso a programas de reinserción laboral, con el objetivo de que los participantes logren autonomía económica y puedan mantenerse alejados de la calle.

“Casa Familia Juana Manso” tiene capacidad para 41 personas y cuenta con un equipo especializado que aborda casos de violencia intrafamiliar, uno de los problemas que muchas veces está relacionado con las personas que viven en situación de calle. Además, el enfoque del programa es claro: desinstitucionalizar el proceso, lo que implica trabajar en la integración social y la autonomía de los residentes para que puedan llevar una vida independiente, sin depender de la ayuda del Estado a largo plazo.

Gabriel Mraida, Ministro de Desarrollo Humano y Hábitat de la Ciudad de Buenos Aires, remarcó que este es el último paso para lograr la reinserción definitiva de las familias en la sociedad: “Casa Familia” es el lugar donde las personas pueden reinsertarse en la comunidad con la autonomía necesaria para salir definitivamente de la calle. Es un paso más en la construcción de una sociedad más inclusiva.

Los Centros de Inclusión Social (CIS), que funcionan las 24 horas, siguen siendo fundamentales en este proceso, ya que cubren las necesidades más básicas de las personas en situación de calle, como alojamiento, alimentos, higiene y asistencia psicológica. La Ciudad cuenta con 47 CIS, donde se brindan servicios adicionales como ayuda con la documentación, prestaciones de salud y asistencia para problemas de consumo.

Prioridad para porteños

En cuanto a la prioridad de ingreso, el programa “Casa Familia” dará preferencia a las familias porteñas, ya que más del 60% de las personas en situación de calle en la Ciudad provienen de la provincia de Buenos Aires. Las familias que deseen ingresar deben firmar un acuerdo de convivencia, que establece las reglas de funcionamiento del lugar. Además, deberán asumir responsabilidades en las tareas diarias, como preparar sus alimentos, mantener limpios sus espacios y colaborar en la limpieza de los lugares comunes.

Las primeras familias que se mudarán a la “Casa Familia” son aquellas que se encuentran en los últimos pasos de su proceso de reinserción en los Centros de Inclusión Social. Entre ellas se incluyen mujeres con hijos provenientes de los CIS Azucena y América, quienes se encuentran en proceso de egreso y tendrán la oportunidad de dar el siguiente paso hacia la independencia.

Una mirada al futuro

El programa “Casa Familia” representa un cambio de paradigma en la forma en que la Ciudad de Buenos Aires aborda el problema de las personas en situación de calle, buscando no solo un refugio temporal, sino también herramientas para la autonomía y la reinserción social. Con iniciativas como esta, la ciudad avanza en la creación de un futuro más inclusivo, donde todas las personas, sin importar su origen o circunstancias, tengan la oportunidad de reconstruir su vida con dignidad y esperanza.

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