La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, ha intensificado su confrontación con el PRO y sus principales figuras, Mauricio y Jorge Macri, en medio de la creciente crisis que ha generado la fuga recurrente de presos de comisarías porteñas. Bullrich, quien se ha convertido en una figura clave del gobierno de Javier Milei en su intento de debilitar la hegemonía del PRO en la Ciudad de Buenos Aires, lanzó duras críticas contra los Macri a través de las redes sociales, especialmente a Mauricio Macri, ex presidente de la Nación, y su primo, el actual ministro de Seguridad porteño.
En un tuit incendiario, Bullrich acusó a los primos Macri de tratar a la Ciudad de Buenos Aires como un botín, criticando su manejo de la seguridad y la falta de infraestructura para alojar detenidos en el distrito. La ministra no dudó en señalar que el país ya no está dispuesto a seguir asumiendo la carga de los presos de CABA. “Macri, Mauricio, el país requiere que ustedes dejen de pensar en sus intereses particulares y usar la Ciudad de botín. Se acabó esa Argentina”, escribió Bullrich, desechando de manera tajante cualquier posibilidad de acercamiento con su ex jefe político.
Bullrich, en su mensaje, también exigió que la Ciudad de Buenos Aires tome responsabilidad por sus propios presos y cárceles, tal como lo hacen las provincias del país. “Está decidido que el resto del país no va a continuar manteniendo a los delincuentes de CABA. Todas las provincias se hacen cargo de sus presos y cárceles, es momento de que dejen de financiar festivales, firmen la transferencia y hagan lo mismo”, afirmó.
La ministra de Seguridad también hizo referencia a la falta de acción en la construcción de nuevas cárceles, recordando que la Cárcel de Marcos Paz, que se comprometieron a finalizar en 2020, sigue sin estar lista, mientras que la situación en la cárcel de Devoto y las comisarías porteñas es insostenible. “Se quedaron con la policía, se quedaron con la cárcel de Devoto, pero pretenden que el resto del país les banque los presos. La cárcel que se comprometieron a terminar en Marcos Paz debía estar lista en 2020, pero cinco años de desidia y 2000 presos hacinados después, vienen a pedirme que me los lleve”, denunció.
Con una crítica mordaz hacia los gestos simbólicos, Bullrich también señaló que “Gestionar la seguridad no es diseñar uniformes”, un golpe directo a las gestiones de los Macri en cuanto a la administración de la seguridad en la Ciudad. En su mensaje, también cuestionó la falta de acción frente al hacinamiento en las cárceles y la fuga de detenidos. “No podemos seguir presos donde no deben estar y son un peligro para todos”, enfatizó.
La respuesta de Jorge Macri no se hizo esperar. El mandatario porteño insistió en que la situación no solo afecta a la seguridad pública, sino también al sistema penitenciario. “Nadie puede garantizar que los presos no se escapen mientras estén en lugar incorrecto. No podemos seguir presos donde no deben estar y son un peligro para todos”, dijo, apuntando a Bullrich para que ponga por encima de todo el interés general y no el partidario.
A su vez, el ex presidente Mauricio Macri también se sumó al reclamo, manifestando su postura sobre el tema. A través de un mensaje en su cuenta de X, Macri dejó claro su desacuerdo con la gestión de los presos en las comisarías. “Los casi 27.000 policías que tiene la Ciudad tienen que estar al servicio de cuidar las calles y a los porteños, no a los presos. El Ministerio de Seguridad y el Servicio Penitenciario Federal tienen que cumplir con su responsabilidad. La Ciudad está para ayudar, pero las comisarías no son cárceles”, remarcó.
El conflicto entre Patricia Bullrich y los Macri refleja una lucha interna por el control de la seguridad y el poder político en la Ciudad de Buenos Aires, que, lejos de apaciguarse, parece seguir escalando con cada nuevo cruce de acusaciones.