7-2-17
El jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, emprendió hoy obras de servicios básicos en las calles 104 y 12 del Barrio 31.
Según se comunicó, estas le ofrecerán a 2.200 personas que residen allí el acceso a los servicios de agua corriente, red cloacal, desagüe e iluminación.
Rodríguez Larreta discurrió esto como “un paso muy importante” hacia la unificación de la Ciudad.
Asi mismo enfatizo “La idea es que todos los vecinos puedan tener acceso a los mismos servicios que en cualquier otro barrio” , añadiendo que “esto era un barrial, los chicos los días de lluvia no podían ir a la escuela” y “hoy, que tengan los mismos derechos que los vecinos de cualquier otro barrio, es un cambio enorme”.
Estos trabajos constituyen parte de un plan integral, marcó además el Jefe de Gobierno. “Esto es parte de un plan mucho más grande. Vamos paso por paso, a fin del año que viene va a estar terminada la infraestructura en todo el barrio y ya empezamos en otros barrios de la Ciudad”.
Rodriguez Larreta estuvo acompañado por el vicejefe de Gobierno, Diego Santilli, y el secretario de Integración Social y Urbana, Diego Fernández, quien ofreció más detalles acerca de las obras que están llevándose a cabo en otras zonas del Barrio 31. “En un mes terminamos la calle Avellaneda que son cuatro cuadras más, estamos en obras en el Playón que es la zona más céntrica del barrio, y en el proceso de adjudicar dos obras más en la calle Perette, que es la calle que queda en el extremo sur de entrada al barrio” dijo Fernández.
A lo largo de cuatro cuadras se ejecutaron encargos de pavimentación, instalación de la red de desagüe pluvial, red cloacal, suministro de agua, tendido eléctrico y alumbrado público.
Tenemos que decir que estas obras acarrean a la formalización de los servicios, ya que al colocar medidores cada vecino pagará lo que consume.
Asumiendo que siempre hay dictámenes encontrados, y fundamentalmente en un tema discutido y confuso como lo es éste, hay que esperar para evidenciar resultados de una medida convertida en obras de urbanización en lo que fuera un sitio precario pero que llegó a tener, sobre todo en los últimos tiempos, un incremento desmedido. Innegablemente las obras tienen que rebosar en favor de quienes viven allí .Por ejemplo admitirán más movilidad, incluido el ingreso de servicios de emergencias como ambulancias, bomberos o policía; se aguarda además que se compriman los problemas de inundación los días de lluvias, una mejora en la salubridad de los habitantes del sector a partir sobre todo del paso al agua potable, y que se reduzcan los riesgos de incendio al estipularse el sistema de cableado eléctrico, entre otras consecuencias.