Durante el año 2024, el Ministerio de Educación recuperó 1,7 toneladas de residuos orgánicos para compostaje, gracias a una campaña implementada por el Programa Ministerio Sustentable y con la mentoría de la consultora danesa iNudgeyou. El edificio del Ministerio, ubicado en el Barrio Mugica, cuenta con un sistema integral de separación y recolección de residuos reciclables, que resulta clave para fomentar prácticas sostenibles y minimizar el impacto ambiental.
A lo largo del año, se gestionaron más de 1.500 kg de materiales reciclables, retirados por una cooperativa de la Ciudad para su reutilización, y 820 kg de botellas PET a través del proyecto «Botellas de amor». Este programa permite transformar las botellas en madera plástica, utilizada para fabricar mobiliario urbano como bancos, mesas, composteras, juegos infantiles y cestos, promoviendo así la economía circular.
Como desafío adicional para 2024, se buscó instaurar el hábito de separar los residuos orgánicos generados en el sector comedor del edificio.
Para ello, el Programa Ministerio Sustentable desarrolló un plan con el apoyo técnico de la consultora iNudgeyou, que incluyó el análisis de comportamientos y estrategias específicas para el tratamiento de los residuos orgánicos. Gracias a estas acciones, se recolectaron 1,7 toneladas de residuos orgánicos, los cuales fueron enviados al Centro de Reciclaje de la Ciudad para ser compostados y convertidos en enmiendas orgánicas destinadas a espacios verdes. Este proyecto abordó el desafío de fomentar la separación de residuos en un edificio que alberga a 2.000 empleados públicos y lleva adelante iniciativas de integración social con la comunidad del Barrio Mugica.
El plan de gestión integral de residuos también incluyó un programa piloto para recolectar los residuos orgánicos generados durante la preparación de alimentos en el comedor.
Como parte de la iniciativa, se instalaron cestos específicos para residuos orgánicos con señalización adecuada. Posteriormente, se realizó un monitoreo mediante el pesaje de residuos, evaluando la calidad de la separación, y se desarrolló una campaña intensiva de concientización dirigida a los empleados a través de diversos canales internos de comunicación.
Con base en los datos obtenidos y las recomendaciones de la consultora, se decidió reubicar los cestos, reduciendo su cantidad en el área del comedor. Esta medida mejoró significativamente la calidad de la separación. Además, las acciones de concientización impactaron positivamente en el comportamiento de los empleados, reduciendo los errores en el uso del contenedor orgánico. Los desvíos diarios disminuyeron de 7-8 al inicio del proyecto a menos de 2 tras las acciones implementadas.
En total, se lograron recolectar 1,7 toneladas de residuos orgánicos, que fueron procesados en el Centro de Reciclaje y reutilizados como enmiendas para mejorar espacios verdes.
En conclusión, la transformación de los hábitos de manejo de residuos sólidos urbanos es una estrategia clave para alcanzar los objetivos climáticos del Plan de Acción 2050. La gestión integral de residuos es parte del compromiso asumido por el Ministerio de Educación para construir un futuro más sostenible. Separar correctamente los residuos y aplicar las estrategias adecuadas genera beneficios significativos tanto ambientales como sociales.