Este 1º de enero comenzó a regir formalmente la ley que creó el Sistema Integral de Seguridad Pública, dicha ley tuvo su aprobación en el mes de noviembre en la Legislatura porteña, por la que se formó la nueva Policía de la Ciudad, que fusiona la Metropolitana con las estructuras transferidas de la Federal. No hubo muchas ceremonias. Pero si incidentes que desnudaron al tensión existente en rechazo del cambio impuesto.
Es por esto que relatamos que ya comenzaron a notarse en la ciudad porteña a los primeros agentes de la nueva fuerza integrada por alrededor de 25 mil agentes de la Federal (en su mayoría) y la Metropolitana, vistiendo el uniforme bordó y turquesa. La ley de entró en vigencia.
Así fue comoel jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, fue a conocer y tomar contacto oficialmente a la nueva policía, visitó las instalaciones refaccionadas de la Comisaría 30 en Barracas y destacó que el “objetivo” de la reforma es “que los policías estén en la calle”.
Horacio RodriguezLarretaque estuvo acompañado por el vicejefe de Gobierno porteño, Diego Santilli; los secretarios de Seguridad porteño y nacional, Marcelo D´Alessandro y Eugenio Burzaco, respectivamente; y el jefe de la Policía de la Ciudad, José Pedro Potocar. subrayo -“Tomamos una decisión histórica, se había anunciado hace 40 años la necesidad de que la Ciudad tenga su propia policía”-,
El Jefe de Gobierno comentoacerca de las mejoras que ya pueden verse en “muchos frentes” y remarco: “Dijimos que había que capacitar a muchos efectivos transferidos, ya se capacitaron 6 mil; dijimos que había que sacar policías a la calle, ya se sacaron 200 policías a la calle en ese proceso; dijimos que íbamos a incorporar tecnología, ya pusimos los primeros lectores de patentes; dijimos que había que fortalecer la seguridad en el transporte público, pusimos más policías con cámaras en el subte y bajaron las denuncias”.
UN CAMBIO QUE SERÁ PROGRESIVO
De esta forma el comisario inspector José Potocar (58), que también es abogadosera Jefe superior de toda la nueva Policía de la Ciudad, que reemplazó íntegramente a la Metropolitana e integró a los 19 mil agentes de la Federal que ya habían sido traspasados a la órbita porteña. Las comisarías, por su parte, irán cambiando su funcionamiento progresivamente y personal civil tomará denuncias y atenderá a la gente para que “esos policías que antes hacían tareas administrativas estén en la calle”, explicaron en el Ministerio de Seguridad. Tampoco manejarán más “la caja” desde esta semana. Para comprar insumos o mantener las dependencias, los policías deberán solicitar órdenes de compra como “cualquier oficina del Gobierno de la Ciudad”.
Al menos durante los primeros meses aseguran que el cambio no será notable para los porteños. Asi entonces los vecinos apenas podrán ver a los primeros agentes vistiendo nuevos uniformes y algunos móviles ploteados con el nuevo logo. Según habían anunciado, comprarán 300 patrulleros y 40 pickups, todos “blindados y equipados con alta tecnología”. Además de 300 motos, 60 cuatriciclos y 40 autos eléctricos, que irán saliendo a la calle progresivamente.
Distintas voces desde el Ministerio de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires aclararon “Que no tengan el uniforme nuevo no quiere decir que no estén integrados al nuevo sistema de seguridad integral. La ley ya está en vigencia. La intención es cambiar la lógica a una Policía de cercanía, modificar el tipo de trabajo y optimizar recursos”,
Se desprende entonces que con los cambios que se avecinan la cifra de agentes en el territorio de la Ciudad aumentará por los 800 egresados que terminaron su formación y se incorporarán a la fuerza desde ahora, pero mantendrá la misma cantidad que antes de la aplicación de la ley. “Entre otras cosas, la nueva ley implica la creación de un instituto universitario de formación, el primero público de la Ciudad”, dijo el ministro de Justicia y Seguridad porteño, Martín Ocampo.
“Martin Ocampo pide juicio Penal”
Martín Ocampo, el ministro de Seguridad de la ciudad de Buenos Aires, está convencido de que el ataque de tres policías a una foto suya en una comisaría porteña “es más grave que para una sanción de apartamiento de las fuerzas” y, por lo tanto, “amerita un castigo penal”, de esta forma le confirmo a la prensa que los efectivos fueron pasados a disponibilidad mientras se investiga el hecho. “Lo que hicieron es más grave que para una sanción de apartamiento de las fuerzas, amerita un castigo penal”, dijo Ocampo esta mañana a radio Mitre.
Continuó con el tema e indico que él se mantiene -“al margen de la investigación”- que lleva adelante el fiscal de la Ciudad de Buenos Aires y el secretario de Seguridad porteña, para “mantener su independencia”, y señaló que los tres responsables “ya están identificados” y “ya están apartados de la fuerza”. “Cuando termine la causa se tomarán las medidas judiciales y administrativas correspondientes. Las autoridades esperan que termine la investigación para expulsarlos de la fuerza, pero esta gente ya está apartada de la fuerza en este momento”, precisó.
El Ministro se refiere al episodio que tuviera lugar algunos días atrás cuando en el interior de una comisaría, tres suboficiales de la Policía de la Ciudad, que hace días habían pertenecido a laPolicia Federal, se filmaron atacando una foto en una pared del ministro de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires, Martín Ocampo. Más allá de la relevancia política del hecho, Ocampo no dio detalles sobre en qué comisaría ocurrió el agravio e, incluso, afirmó que se mantuvo “al margen” para “garantizar la independencia de la investigación”.
También aclaro que en la comisaría donde se produjeron los hechos se han tomado “intervenciones administrativas, de seguimiento y control”, pero dejó claro que “no es toda la comisaría, sino tres personas”, por lo que descartó que se tomara la decisión de intervenir la comisaría. Ocampo explicó que el ataque a la foto de un funcionario es un ataque a un “bien público”, que es “patrimonio de la Ciudad de Buenos Aires” y, además “una intimidación y una amenaza”
De esta manera Martin Ocampo interpreta que los hechos se suscitaron a partir de la creación de la nueva policía y desde ese razonamiento dijo “No van a lograr el objetivo que intentan, no vamos a dejar que nos intimiden, y no vamos a cambiar una decisión política de reforma sobre la policía. En eso somos intransigentes”,
Ocampo esta seguro que el ataque representa a gente que teme “perder privilegios” y que “no quiere el cambio” dentro de la fuerza policial, porque y señaló que la decisión de continuar con las reformas en la policía “está conversada con el Presidente de la Nación (Mauricio Macri), y fue una propuesta en la campaña política, ejecutada en los primeros días de enero del año pasado”.