Bajo un estricto protocolo exigido por el Gobierno de Buenos Aires, los titulares y/o responsables de la dirección de Centros Comerciales tendrán que tomar las gestiones ineludibles para prevenir y tramitar de modo conveniente los peligros frecuentes del Coronavirus.
Las recomendaciones son varias, por ejemplo, que los empleados que proporcionen servicio dentro del centro comercial, sea exiguo e indefectible, constituidos en grupos rotativos de personal para comprimir la permuta de individuos y certificar las normas de prevención encomendadas en toda la jornada laboral, como ser, la distancia entre personas de al menos 2 metros, no más de 1 persona cada 15 m2, llevar al mínimo posible la convivencia simultánea de personas en un mismo espacio físico, uso de tapabocas en todo momento para la totalidad personas que permanezcan en el establecimiento cualquiera sea el carácter ó rol que desempeñen.
Es forzoso fortificar las medidas de higiene personal en todos los perímetros y frente a cualquier escenario de exhibición. También, se pide identificar al personal, controlar la temperatura antes de ingresar (tanto de los trabajadores como consumidores) y endurecer la higiene y desinfección en general de todos los ámbitos.