Miles de juguetes con riesgo de toxicidad, valorados en más de 100 millones de pesos, fueron incautados y dos locales fueron cerrados en una serie de inspecciones integrales en las que participó la Policía de la Ciudad.
Los cinco encargados de los establecimientos fueron notificados del inicio de una causa por comercialización de productos “sin cumplir con las exigencias legales de control y careciendo de certificados de toxicidad” y tampoco del “rotulado y etiquetado” sobre los componentes químicos, infringiendo normas emanadas del Ministerio de Salud, además de productos sin el estampillado de AFIP.
Las operaciones estuvieron a cargo de oficiales de la División Conductas Informáticas Ilícitas de la Policía de la Ciudad, a partir de una orden de la Fiscalía en lo Penal, Contravencional y de Faltas 4, a cargo del Dr. Mauro Tereszko, tras las tareas de campo realizadas por los detectives que comprobaron lo que allí se comercializaba.
La Fiscalía dispuso llevar a cabo las inspecciones en cuatro locales del circuito comercial de Once y uno en Belgrano con personal policial y también de la Agencia Gubernamental de Control (AGC), luego de que la apoderada de la marca Funko Pop, Universal City Studios LLC (Minions, Jurassic World y Trolls) y Lego, realizara una denuncia por falsificación de marca.
En este contexto, uno de los locales inspeccionados fue en Juramento al 1600, en Belgrano, donde se incautaron 735 cajas de juguetes, algunos presentados como muñecos Funko Pop y también Lego, que carecían de los certificados de seguridad, con un valor de mercado de 23 millones de pesos.
Personal de la AGC clausuró el local debido a matafuegos caducos, cableado irregular y falta de señalizaciones.
De igual manera, en el resto de los locales investigados, sus encargados fueron notificados del inicio de la causa.
Los oficiales acudieron a dos comercios en la calle Azcuénaga, al 200 y 300, donde se incautaron 618 cajas de juguetes con inscripciones de Funko, Funko Pop, Lego, peluches Among Us y también llaveros con los logos de Nike y Minions.
Otros dos comercios fueron inspeccionados en Teniente General Perón al 2500, en uno de los cuales los oficiales decomisaron 456 juguetes similares a Funko Pop y Lego, con un valor por unidad de entre 2.000 y 4.000 pesos.
El último local, contiguo al anterior, estaba en un edificio de cinco plantas utilizado como depósito de distribución de varios comercios, donde los oficiales hallaron diversos productos, entre ellos inflamables, con un valor estimado de 70 millones de pesos.
Los detectives decomisaron 1.037 juguetes alusivos a Funko Pop, 68 con leyendas de Lego, 200 auriculares con la marca Samsung, 134 ojotas falsificadas con marca Nike, gorras, limas y 40 perfumes con la inscripción Chanel N° 5.
En el depósito había material inflamable sin medidas de seguridad, sin mangas de incendio ni red de agua, y solo dos extintores para todo el establecimiento, por lo que la AGC impuso tres clausuras administrativas.