El hecho ocurrió cuando un efectivo de la División Avenidas Céntricas se encontraba cumpliendo funciones en de vigilancia en la calle Posadas al 1100 y observó en la puerta de un edificio a un auto, un Renault Logan gris, que estaba estacionado en doble fila.
Momentos después, salió del edificio una empleada doméstica y le entregó una bolsa gris al conductor del rodado, por lo que el agente pidió refuerzos y juntos intervinieron para descubrir que se trataba de una maniobra extorsiva bajo la modalidad de secuestro virtual, y que en el paquete había 31.000 dólares.
Ante esta situación, el personal policial detuvo al sospechoso, quien dijo ser remisero y que había sido enviado al edificio para trasladar un paquete hasta una farmacia ubicada en Juan B. Justo y Nazca.
Por su parte, la empleada doméstica, responsable de la entrega, les contó a los policías que, momentos antes, su patrón, un hombre de 78 años de nacionalidad belga, le pidió que pusiera esos ahorros en la bolsa y se la entregara a un auto que estaba próximo a estacionar, porque su hijo había sido secuestrado
En la causa intervino el Juzgado Nacional Criminal y Correccional N° 41, quien dispuso la detención del conductor involucrado y la entrega de las pertenencias al hombre al que se quería estafar.
Ante casos como estos o cualquier sospecha de estafa, comuníquese de inmediato al 911 de la Policía de la Ciudad o diríjase a la Comisaría Comunal más cercana.